¿Qué cuentan? Los niños imaginarios de Valentina Toro

La imaginación es infinita, no tiene límites, y hay que romper donde se cierra el círculo; hay una puerta, puede haber una puerta de escape, y por esa puerta hay que desembocar, hay que irse.

Juan Rulfo[1]

                                                                                                

La imaginación sigue siendo un proceso que se fomenta y se fortalece en la casa y la escuela como herramienta esencial para que los niños y las niñas asuman posturas críticas y constructivas en los sectores sociales.

En palabras de Alejandro Jodorowsky:[2]

La imaginación actúa en todos los terrenos, incluidos los que consideramos “racionales”

Lo anterior nos dice que la imaginación puede considerarse como la base que constituye el sentir y pensar de los seres humanos en sucesos cotidianos y universales.

Por ello, el mundo infantil sigue siendo pionero de la imaginación en los hechos que permean los ejes cultural y social, definiéndose así en el imaginario de la. Según el pensamiento de Ken Robinson:[3] 

Los niños tienen una confianza asombrosa en su imaginación. La mayoría perdemos esta confianza a medida que crecemos.

Es decir que los infantes son ejes esenciales de la práctica de la imaginación que suele perderse conforme crecen. Además, es importante fomentar y encaminar este hábito con instrumentos de creación como la lectura y la escritura.

Partiendo de esta premisa, la escritora colombiana Valentina Toro[4] nos presenta su libro Los niños imaginarios, una historia que aborda temas como el duelo, la imaginación y la valentía. El libro nos presente a Lorenzo, su protagonista, quien es un niño que lleva una vida feliz, sin embargo, acudirá a estas estrategias durante una tarde gris y lluviosa cuando su padre fallece y todo cambia a tal punto que se muda a la casa de su abuela Flora junto con sus hermanos y su mamá.

Cerca de su nuevo hogar hay un bosque al que no deberá entrar porque, según su abuela, allí habitan bestias y alimañas que lo devorarían en un santiamén. Un día, un perro sale entre los árboles y lo invita a ingresar con dos libros y una nota que son las pistas que Lorenzo deberá seguir a través de un bosque tan antiguo como el mundo para descubrir los secretos sobre su papá y sobre él mismo, pero no lo hará solo, los niños imaginarios estarán a su lado.

Finalmente, la invitación es a leer este libro como un referente de la literatura infantil que consolida el papel de la imaginación como estrategia que comprende los acontecimientos que abordan los campos socioculturales en la niñez y la posibilidad de transcender en el tiempo.

  

Bibliografía

Toro, V. (2017). Los niños imaginarios. Editorial: Planeta Junior. 

[1] Fue un escritor, guionista y fotógrafo mexicano perteneciente a la Generación del 52. ​​ Es considerado uno de los escritores hispanoamericanos más importantes del siglo XX. ​​​

[2] Es un artista, cineasta y escritor chileno, nacionalizado francés, de ascendencia judío-ucraniana.

[3] Fue un escritor, conferenciante y asesor internacional sobre educación británico, considerado un experto en asuntos relacionados con la creatividad, la calidad de la enseñanza, la innovación y los recursos humanos.

[4]Ilustradora y escritora de literatura infantil y juvenil. Magíster en Escritura Creativa. Autora de ocho libros, entre los cuales se destacan Los niños Imaginarios (2017) y Mi monstruo y yo (2019).

Déjanos tu comentario
Tags:

Tal vez pueda interesarte...