Al igual que todas las manifestaciones, el cine tiene su propio sistema de significaciones o lenguaje, gracias al cual es posible apreciar el desarrollo de las historias y los encuadres. Nada en el cine está por casualidad y es que el trabajo del director, camarógrafos, continuistas y editores es presentar una sucesión de imágenes y sonidos perfectamente alineados como unidad para el entretenimiento del espectador.

Por ello, en esta ocasión te presentamos 4 secuencias del cine contemporáneo que se destacan por su calidad en el lenguaje cinematográfico y la edición.

1. Submarine (2010)

Comenzamos con, quizá, la secuencia más popular de esta lista. Submarine es una obra dirigida por Richard Ayoade, quien se ha destacado por sus trabajos en los videoclips de Arctic Monkeys. Esta película presenta la historia de Oliver Tate, un joven introvertido enamorado de la enigmática Jordana Bevans.

En esta secuencia podemos apreciar una serie de acciones entre los personajes, musicalizadas por «Hiding Tonight» de Alex Turner, las cuales son presentadas a manera de flashforward al momento en que Oliver se encuentra en su habitación escuchando la canción. Además, el director usa la metareferencialidad cinematográfica como recurso para justificar estas escenas. Sólo mira cómo la secuencia se complementa con cada acorde de la canción.

2. Mommy (2014)

Si algo sabe hacer este joven canadiense, además de saber contar perfectamente historias sobre las preferencias sexuales y el existencialismo del amor, es generar secuencias únicas con los elementos musicales y visuales del lenguaje cinematográfico. En esta película, Dolan presenta la historia de un chico con problemas de conducta y su madre desesperada por sacarlo adelante. El largometraje transgrede este lenguaje desde el inicio, ya que comienza utilizando un formato 4:3 para representar el aprisionamiento de los personajes en un cuadrado, el cual prevalece durante la mayor parte del largometraje hasta esta escena musicalizada con «Wonderwall» de Oasis, en la que podemos ver cómo el protagonista se funde en la canción y rompe la cuarta pared para liberarse del atávico formato cuadrado. Sin duda esta secuencia demuestra que para transgredir un sistema, primero hay que conocerlo a fondo.

3. Los amores imaginarios (2010)

Añadimos otro ejemplo de Xavier Dolan porque esta secuencia se volvió icónica entre los hipsters. Pertenece a la película Los amores imaginarios (Les amours imaginaires), que cuenta el triángulo amoroso de Francis y Marie por Nicolás para explorar las trivialidades del amor. En esta escena podemos apreciar el cadencioso baile de Nicolás ambientado con la canción «Pass this on» de The Knife la cual entona muy bien con el estilo visual estroboscópico de Dolan.

La secuencia no aporta nada a la historia, sin embargo, funciona muy bien por la edición que la vuelve una unidad indivisible comenzando con ese sutil zoom out que marca la apertura de la canción.

https://www.youtube.com/watch?v=roLmFo3rWYc

4. Una chica vuelve a casa sola de noche (2014)

Sin duda alguna, esta película iraní producida por VICE fue una de las más aclamadas en su año, no sólo por su historia, sino también por su calidad estética y transgresión. El largometraje presenta a una vampírica joven iraní que recorre las calles de Bad City en busca de sangre de misóginos y delincuentes, hasta el momento en que reconoce la sensibilidad de una de sus víctimas.

Esta escena se convirtió en una metáfora visual debido al puntual ritmo de cada uno de sus elementos. Para comenzar, la canción que se escucha es «Death» de White Lies que habla precisamente del inevitable desenlace, sin embargo al atender las acciones en pantalla podemos ver que esta significación se transforma en un acto comparativo de la muerte y el amor por parte de los protagonistas, una contraposición que termina por colocar al amor a la misma altura e intensidad que la muerte.

Sólo tienes que atender la letra de la canción, su ritmo y la unidad bien lograda en la secuencia.

Sin duda alguna, el cine es una manifestación que permite la creación de grandes obras y signos trascendentes, de los cuales estamos seguros que se seguirán produciendo e innovando por mucho tiempo más.

Dorian Huitrón Álvarez

Lector y peatón. «Yo soy aquel». Dicen que soy el chico al que los golondrinos le laceran las axilas.

A veces escribo sobre lo que me gusta, otras entreno Pokémon.